... De una nube surgió, a una nube voló...
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Una mañana en un colegio de Primaria, se encontró un maestro en la
tesitura de dar clase a sus alumnos sin su "libro del profesor", repleto
éste de ejemplos prácticos, dinámicas para el grupo, y, por supuesto,
las lecciones de aquel día...
... Corriendo, acudió al aula vecina a preguntar
por él a otro maestro, compañero de fatigas,... "No sé dónde lo he
podido dejar... ¡¡¿Qué hago?!!"...
...
Ambos profesores regresaron juntos al aula, en la que aguardaban los
alumnos, ya algo nerviosos... El maestro vecino vio sobre la mesa un
tapón de botella, e inmediatamente lo levantó sobre su cabeza y alzó la
voz... Preguntando ante los ojos espectantes de los niños... "¿Qué es
esto?"...
... "Un tapón", respondió Lucía con sus 8 años... "Sí, pero... ¿Qué más podría llegar a ser este tapón?", añadió el maestro...
... "Un sombrero", levantando la mano timidamente, dijo Daniel... "Un
vasito", susurró Sonia... "Una cajita para guardar arena", sugirió
Mateo... "¡Una cajita para guardar secretos pequeños!", gritó emocionado
Pablo... "El orinal de un enano", soltó Jaime... y todos rieron.
... "¿Y si lo colocamos
así?, replicó el maestro, poniendo el tapón verticalmente... "Un parche
para un pirata", contestó Irene... "La casa de una hormiga", planteó
Jorge... "El botón de la chaqueta de mi tia Luisa",... "Un reloj de
pared",... "Un ojo de un robot",... "¡Qué buena esa idea!" reconocieron
algunos...
... El grupo pasó la mañana dibujando sobre la pizarra de qué estaban
hechas las diferentes partes de "el robot del ojo de tapón", diseñando
su propio robot en un papel, y, por parejas, exponiendo ese robot a sus
compañeros, y, finalmente, escribiendo una historia en la que los robots
inventados entre todos apareciesen...
...
Dos semanas más tarde, el profesor del grupo volvió a aparecer alarmado
por la puerta del maestro vecino, compañero de fatigas,... "He vuelto a
perder mi "libro del profesor",... y tampoco encuentro...
... ¡el tapón!">>
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